jueves, 25 de octubre de 2012

Prometheus o ¡¿POR QUÉ?!

Acabo de ver Prometheus. Hacía meses que no escribía en el blog, de hecho casi un año, pero aquí estoy para contaros una experiencia cinematográfica terrible.

Como os decía, acabo de terminar de ver Prometheus, película del 2012 dirigida por Ridley Scott. Había estado dando la brasa con ir al cine a verla desde que se estrenó, pero nunca fui. Ahora todos mis temores se han hecho realidad. Y es que Prometheus es la precuela de Alien (1979, Ridley Scott) y mi subconsciente se inclinaba a pensar que algo no muy bueno se cocía alrededor del film.

Alien supone una pieza clave en la historia de cine, y más dentro de mi admirado género de la ciencia ficción. Hacer Prometheus no significaba estar a la altura, sino superarla. Y eso era muy difícil. Aún así, atónito me he quedado con la simpleza de Prometeus. Si Alien y Blade Runner (Ridley Scott, 1982) son dos obras MAESTRAS del género, Prometheus no aporta nada. La trama es simplona y el reparto no dice nada. Los personajes no progresan, están definidos desde el minuto 0. Puro convencionalismo, estereotipados al máximo. Estéticamente es letal. Lo hemos visto ya todo antes. Es barroquismo del vulgar, quince millones de maquinitas que sirven para todo. Nada sutil, no deja margen a la interpretación. Diálogos saturados, aspiraciones pretenciosas. Simplemente, un blockbuster.

Si algo malo te puede pasar en cine, es ser mediocre. Prometheus lo es. Ahora Mr. Scott prepara una segunda parte, y la precuela de Blade Runner. Por favor, que no se me caiga otro mito... !